Con una imagen mucho más negativa que en sus presentaciones anteriores, Boca quedó eliminado del Mundial de Clubes en una jornada accidentada y en la que todo lo que podía salir mal, salió mal, tras igualar 1-1 con Auckland City en Nashville.
Además, el sorpresivo triunfo de Benfica sobre Bayern Munich en Charlotte, dejó sin posibilidades al conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo. Como agregado, el partido del club La Ribera fue demorado varios minutos por alerta de tormentas eléctrica.
El Xeneize llegó a la última jornada con un punto, por lo que precisaba ganar el encuentro ante el conjunto neozelandés y convertir muchos goles -por lo menos seis- para mejorar la diferencia de gol: -1. Sin embargo, todo quedó en el recuerdo porque el elenco portugués, que contó con los argentinos Ángel Di María, Nicolás Otamendi y Gianluca Prestianni, superó 1-0 a su rival alemán y terminó primero en el grupo.
