La empresa SpaceX lanzó con éxito y expectativa el cohete Starship, uno de los más grandes del mundo, para realizar su tercer vuelo de prueba. El objetivo a largo plazo es que pueda ser utilizado en viajes a la Luna y Marte, sin embargo, durante su regreso a la Tierra, se "perdió". La compañía de la que es dueño Elon Musk confirmó que la "pérdida" de la nave poco después de hacer su reingreso en la atmósfera terrestre y antes de que alcanzara las aguas del océano Índico. Según indicaron en un comunicado, estuvo a poco de completar la totalidad del vuelo.  La compañía lanzó el cohete para su tercer vuelo de prueba tras los dos intentos que terminaron en explosiones el año pasado. La nave despegó de Boca Chica, en Texas, Estados Unidos, y el principal objetivo era lograr un "regreso controlado" a Tierra. El Starship es el cohete más grande del mundo, con 120 metros de altura, y también de los más potente. Por esa razón, desde la compañía confían en que podrán llevar a las personas a Marte. Incluso, desde la NASA también tienen todas las expectativas puestas en la nave, ya que cuentan con ella para llevar a sus astronautas a la Luna durante su misión Artemis 3 en 2026.