Un grupo de mujeres católicas se congregó a las afueras del Vaticano para denunciar que fueron excluidas. Se trata de integrantes de la Conferencia de Ordenación de Mujeres y, en señal de protesta, encendieron bengalas de humo rosa.
La manifestación tiene por objeto señalar que el proceso de la votación del próximo Pontífice está reservado a cardenales varones.
El grupo se congregó en la colina Ganicolo detrás del Vaticano. “Mientras el mundo puede estar esperando humo blanco o negro, nuestro humo rosa es una señal de que las mujeres deben ser incluidas en todos los aspectos de la vida de la Iglesia”, dijo la directora ejecutiva de la Conferencia Kate McElwee.
En cita a France24, también agregó que “el lugar de una mujer está en el cónclave”. Además, desde la Conferencia dijeron que fueron arrestadas en el pasado al acercar sus protestas a la Plaza de San Pedro.

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