Una joven brasileña de 26 años murió tras caer dentro de un volcán mientras hacía senderismo en Indonesia. Juliana Marins había salido de excursión el viernes pasado con un grupo de turistas por la zona del volcán Rinjani, en Lombok, cuando sufrió un accidente y terminó en un lugar al que es imposible acceder a pie.
La joven estuvo a la deriva en la montaña al menos cuatro días, a pesar de que intentaron rescatarla. Según informaron las autoridades locales, primero cayó unos 300 metros en la montaña, pero luego descendió otros 200 metros más.
La familia de Juliana se desesperó por la demora en el rescate, pero no perdían las esperanzas de encontrarla con vida. “Quiero agradecerles toda la energía positiva, todo el cariño que han enviado. Estoy segura de que ella está sintiendo eso allí ahora y eso la está manteniendo viva. Lo siento", expresó su hermana, Mariana, en redes sociales.
Finalmente, pudieron acceder a donde estaba, pero fue demasiado tarde. “El equipo de rescate pudo llegar al lugar donde estaba Juliana Marins. Con inmensa tristeza, informamos que no pudo resistir. Seguimos muy agradecidos por todas las oraciones, mensajes de cariño y apoyo que hemos recibido”, informó su familia.
