La venta de medicamentos por PAMI sufrió una fuerte caída del 13% entre enero y septiembre de 2024. Sucedió en el marco del ajuste que sufrieron los haberes de los adultos mayores durante el período y la decisión del Gobierno de quitar la cobertura del 100% a una amplia variedad de productos farmacéuticos. Según datos provistos por el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, más conocido como PAMI, las provincias más afectadas fueron las del norte, con Catamarca (-18,6%), Tucumán (-18,3%) y Santiago del Estero (-17,3%) a la cabeza. La única jurisdicción que presentó una mejora fue Santa Cruz (+6,5%), mientras que en otras provincias del sur, como Chubut o Tierra del Fuego, la caída fue acotada. Asimismo, dentro del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se verificó una contracción superior a la media, tanto en la Capital Federal (-14,7%) como en la Provincia (-14,2%). Las variaciones negativas se dan, por un lado, debido a la pérdida de poder adquisitivo que sufrieron los jubilados durante este año. De acuerdo con un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el ingreso promedio anual de un jubilado que cobra la mínima terminaría el año con un recorte real del 15% respecto de 2023, y de casi 30% respecto del último máximo anotado en 2017. Asimismo, un adulto mayor que cobra un haber equivalente a 3 haberes mínimos, culminaría 2024 con una pérdida anual del 19% contra la inflación y una merma del 48% versus 2017. Vale remarcar que la desregulación del mercado farmacéutico llevada a cabo por el Gobierno de Javier Milei desembocó en fuertes aumentos en los precios de los medicamentos, fundamentalmente en diciembre de 2023, cuando un hubo una escalada del 40% en este segmento. El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) reflejó que, entre noviembre del año pasado y noviembre de este año los precios subieron 210,7%, por encima de la inflación general que se habría ubicado en torno al 201,5%.
Javier Milei anunció su intención de implementar una reforma tributaria en 2025, en donde buscará eliminar el 90% de los impuestos nacionales y transferir competencias fiscales a las provincias. Esta propuesta tiene interés en las pymes argentinas. Según un informe privado, las pymes enfrentan una elevada carga impositiva a lo largo del año. En este marco, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) relevó que una pyme promedio debe afrontar, a lo largo del año, el pago de 39 tributos: 20 nacionales, 8 provinciales y 11 municipales, además de cumplir con 30 regímenes de percepción, retención e información. Según el IARAF, una pyme debe enfrentar múltiples tributos según su actividad. Por la compra de insumos, paga el Impuesto al Valor Agregado (IVA), Ingresos Brutos (IIBB), la Tasa de Seguridad e Higiene (TISH) y el impuesto sobre Créditos y Débitos bancarios. En el caso de las compras al exterior, se suman los Derechos de Importación, la Tasa Estadística y el Impuesto PAIS. Sin embargo, el anticipo del 95% asociado a este último dejará de estar vigente a partir del 22 de diciembre, según lo establecido por ley y el compromiso del Gobierno de no renovarlo. Si el producto final se comercializa en Argentina, se encuentra gravado por el IVA, Ingresos Brutos (IIBB), la Tasa de Seguridad e Higiene (TISH) y el impuesto sobre Créditos y Débitos bancarios. Por otro lado, si se destina a la exportación, está sujeto a los derechos de exportación, uno de los tres tributos que el ministro de Economía, Luis Caputo, ha prometido eliminar siempre que se mantenga el superávit fiscal.