El Teatro Flores, en Buenos Aires, ganó calor. Una campaña hecha a pulmón y a puro empuje logró poner sobre las tierras de plata después de 13 años a una banda tan de culto como imprescindible. En la mesa de los próceres del punk se sientan pocos. Ramones, Sex Pistols y The Clash, seguro. Alguno sumará a Iggy Pop, otro hablará de Siouxsie. Pero los que iniciaron este juego como tal son los de "The Damned". ¿Qué es el punk como tal? Un movimiento estético, cultural y político que alcanzó su auge en la segunda mitad de los 70, con Londres y Nueva York como epicentros. Hubo quienes abrieron caminos, claro: The Stooges, MC5, y The Velvet Underground, por ejemplo. Hasta Los Saicos hicieron lo suyo, dirán los heterodoxos. Pero fueron experiencias diseminadas, sin la potencia de la comunión. The Damned, entonces, marcó triple check: primera gira, primer single y primer disco del género. Soberbias armas para la banda inglesa, que encontró en la música el escape a una sociedad gris y pacata, sin futuro ni oportunidades para la juventud (¿suena familiar?).
El domingo 23 de marzo, el Estadio Leoncio Benítez (Boca Unidos, Ruta 12) en Corrientes será escenario de un festival que contará con la participación de Los Ángeles Azules y otros artistas. Las entradas ya están disponibles en línea y en el punto de venta oficial en Vestigium, ubicado en Pellegrini y San Lorenzo. Además, Los Ángeles Azules llegan a la Argentina para presentar su trigésimo álbum "Se agradece", lanzado el año pasado, que incluye colaboraciones con artistas como María Becerra, Alejandro Fernández, Carlos Santana y Panteón Rococó. Durante el evento, la banda interpretará sus clásicos como "El listón de tu pelo", "Yo me lo busqué" y "Cómo me voy a olvidar", así como su reciente colaboración con Thalía.